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Trastorno de la personalidad narcisista


Esta condición psicológica ha llamado la atención en las redes sociales y en plataformas digitales por los diferentes documentales centrados al exponer cuál es la realidad que viven personas con este trastorno y como afectan a las personas de su entorno, en este blog nos concentraremos a detallar esta condición. Este trastorno es un patrón persistente de grandiosidad, donde se mantiene una necesidad excesiva de admiración y una falta de empatía por los demás. Las personas que padecen este trastorno suelen tener una perspectiva distorsionada de sí mismas, se sienten especiales y únicas y buscan constantemente la aprobación de los demás. Pero muchas veces una profunda inseguridad y fragilidad emocional se esconden detrás de este exterior seguro de sí mismo. Tanto la vida de quienes padecen este trastorno como la de quienes se encuentran en su contexto pueden verse significativamente afectadas. A continuación, exploraremos en detalle este trastorno, incluidos sus signos y síntomas, los factores subyacentes, mitos y los efectos sobre la sociabilidad.

Quienes padecen un trastorno de personalidad narcisista pueden tener dificultades para comprender las necesidades y los sentimientos de los demás. Pueden mostrar falta de comprensión, empatía, así como insensibilidad o indiferencia hacia los problemas o preocupaciones de los demás. Pueden tener una actitud despectiva hacia las personas que consideran inferiores a ellos, y pueden tener dificultades para construir relaciones profundas y satisfactorias. El comportamiento arrogante y degradante hacia los demás es un síntoma de esta condición. Pueden pensar que están por encima de las normas sociales.

Aunque se desconoce su causa exacta, se cree que el trastorno narcisista de la personalidad es el resultado de una combinación de factores genéticos, biológicos, psicológicos y ambientales. Los siguientes son algunos de los elementos que se han sugerido como posibles causas y factores de riesgo.


Según investigaciones, el trastorno de personalidad narcisista está predispuesto a desarrollarse genéticamente. Los antecedentes familiares de trastornos del espectro narcisista se han relacionado con un mayor riesgo de desarrollar este trastorno. Además, se ha investigado si las variaciones biológicas en el cerebro, como los cambios en la estructura y función del cerebro, pueden desempeñar un papel en la aparición de este trastorno. Por otro lado, los eventos traumáticos de la infancia, como el abuso emocional, físico o sexual, así como el abandono y la falta de atención de los padres, pueden tener un gran impacto en la forma en que una persona se convierte en adulta. Según algunos estudios, aquellos que han pasado por un trauma infantil tienen más probabilidades de desarrollar un trastorno de personalidad narcisista.

El desarrollo de la personalidad de un individuo puede verse influido por los estilos de crianza que encuentro y la forma en que son criados. La sobrevaloración o sobreprotección de los padres, la falta de límites y las consecuencias del mal comportamiento, entre otras cosas, pueden fomentar el crecimiento de una personalidad narcisista. Por otro lado, la perspectiva de una persona sobre sí misma y cómo interactúa con los demás puede verse afectada negativamente por la negligencia, la falta de atención o el abuso físico o emocional de los padres.

Algunas características de la personalidad se han relacionado en algunos estudios con la aparición del trastorno narcisista de la personalidad. Ejemplos de factores psicológicos que pueden contribuir a la aparición de este trastorno incluyen el deseo de poder, la necesidad de reconocimiento y la frágil autoestima. De manera similar, la aparición de un comportamiento narcisista puede verse significativamente influenciada por la inseguridad subyacente, la baja autoestima y la falta de habilidades sociales.

Los rasgos centrales de la grandiosidad, incluida la falta de empatía y la necesidad constante de admiración, pueden tener un impacto negativo en la dinámica de las relaciones tanto en el ámbito familiar como social.

Los siguientes son algunos de los efectos más típicos del trastorno narcisista de la personalidad en las relaciones interpersonales. Falta de comprensión y empatía por los demás: las personas con trastorno de personalidad narcisista con frecuencia luchan por comprender y expresar empatía por las necesidades y sentimientos de los demás. Como resultado de su propensión a un punto de vista egocéntrico en el que sus propias necesidades y el mundo se priorizan. Las personas en su entorno se sienten ignorados, infravalorados o incomprendidos y por ello la calidad de sus relaciones se van deteriorando. También tienen necesidad de atención y admiración todo el tiempo: las personas con trastorno de personalidad narcisista tienen una necesidad incesante de atención y admiración. Esperan constantemente cumplidos y elogios, y se esfuerzan por ser el centro de atención; la dinámica de la relación puede salirse de control como resultado de la tendencia del narcisista a dominar la atención y anhelar la aprobación a toda costa en lugar de preocuparse genuinamente por los deseos y necesidades de otras personas.

Es por esta razón que florecen comportamientos manipuladores y controladores, también pueden ser intolerantes con las críticas o los puntos de vista que difieren de los suyos.

Ahora bien, esta condición es un trastorno mental difícil y frecuentemente malentendido. Numerosos mitos y conceptos confusos se han difundido sobre este trastorno. Uno de los conceptos erróneos más extendidos es que quienes padecen un trastorno de personalidad narcisista son simplemente vanidosos o tienen una autoestima inflada, sin embargo, se extiende más allá de la simple vanidad o la autoestima positiva. Si bien es cierto que todos exhiben algún grado de narcisismo, particularmente durante la etapa de desarrollo de la adolescencia, el trastorno de personalidad narcisista va más allá de los niveles típicos de narcisismo. Están involucrados patrones de comportamiento y pensamiento extremos, que tienen un efecto perjudicial en el funcionamiento diario de la persona y en las interacciones sociales. "Las personas con trastorno narcisista son incapaces de amar", pero esto no es necesariamente cierto. Aunque a las personas con trastorno de personalidad narcisista les puede resultar difícil construir relaciones duraderas debido a sus patrones de comportamiento egocéntricos, esto no significa necesariamente que sean incapaces de amar.

Pueden tener relaciones, pero su egocentrismo y necesidad de admiración pueden tener un impacto en la forma en que aman. Otro concepto erróneo generalizado es que el trastorno narcisista de la personalidad no se puede curar. Aunque el tratamiento para el trastorno narcisista puede ser desafiante y debe mantener un enfoque integral, involucrando terapia psicoterapéutica y, ocasionalmente, medicamentos, muchas personas que lo padecen pueden beneficiarse de la intervención y mejorar su calidad de vida.

Para concluir, no se debe pasar por alto el hecho de que el trastorno narcisista es una condición médica legítima que requiere un diagnóstico preciso y un enfoque calificado para el tratamiento. Los patrones de pensamiento y comportamiento des adaptativos que tienen un impacto en la vida diaria y las relaciones interpersonales de la persona son más importantes que la simple vanidad. La vida diaria y las relaciones interpersonales de alguien que tiene un trastorno narcisista pueden verse afectadas, causando problemas en el trabajo, problemas en las relaciones interpersonales y, en general, una menor calidad de vida.


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